Las leyendas de la mitología vasca , son tesoros de un valor incalculable que se han mantenido generación tras generación, sin ser alteradas y reflejando unos valores que no deben perderse.

En la mitología vasca las Lamias son seres de apariencia humana, femenina, con los pies en forma de ave, viven cerca de los ríos. Se ocultan por el día y se muestran por las noches, destacan por ser defensoras de la honradez y enfrentarse al fraude.

Las Lamias cuando recibían ayuda de los humanos les recompensaban generosamente. Era usual que exigieran ayuda a los humanos sobre comida y otros asuntos pero también se solían ofrecer amablemente para prestar ayuda, de estos últimos hechos esta breve leyenda:

«Cierta noche una de las Lamias se puso de parto así que sus amigas fueron a buscar una comadrona humana. La comadrona se prestó a ayudarlas, después de que la Lamia tuviera a su récien nacido ésta le dio a elegir; entre un tarro de miel y un tarro de manteca.

La comadrona pensó que la manteca le podría ser más útil a pesar de la insistencia de las Lamias para que ella eligiera el tarro de miel, aún así la comadrona acabó llevándose el tarro de manteca guardándolo más tarde en un armario para poder utilizarlo al día siguiente.

Con las primeras luces de la mañana la comadrona abrió el armario, observó con sorpresa que el tarro de manteca ya no contenía manteca; contenía monedas de plata.

De esta forma comprendió que si ella hubiera elegido el tarro de miel la recompensa hubiera sido monedas de oro «.

Personajes fantásticos y ejemplares como las Lamias están presentes no solamente en la cultura escrita, o pintada, pueden estar en otros elementos como el arte, incluso es posible comprar joyas de la mitología vasca, gracias a estas no solo reflejaremos los valores de admirables seres mitológicos también representaremos el carácter y la tradición cultural del país vasco.