La cortina, de aislante del frío a adorno real

En la actualidad es casi posible poder decorar tu casa eligiendo todo lo que necesitas a través de internet, desde muebles, sillas hasta incluso adquirir barras de cortina online.

A lo largo de la historia esta pieza de tela que comúnmente cuelga de puertas y ventanas como adorno o para aislar la luz ha ido teniendo diferentes usos. Durante la época medieval, hacia los siglos V al XV, se empieza a vislumbrar el primer atisbo de lo que será la primera cortina, entendida como un aislante del frío, puesto que el castillo no ofrecía grandes comodidades y las ventanas, sin vidrios, eran muy pequeñas para taparlas en invierno

Castillo_de_Butrón

Hacia el s.XIII el mobiliario, cortinas y persianas se elaboraban en distinto color pero con un único material. Aparecería un nuevo elemento de decoración, las galerías, gruesas y elaboradas en madera, sujetaban las cortinas; más o menos nuestro equivalente actual a las barras de cortinas.

Con la llegada del Renacimiento, la cortina se convierte en adorno real. Los nobles adquieren tejidos en Oriente y adornan los corredores de sus palacios. Ganan popularidad los tejidos como la seda, el terciopelo y los drapeados. Así mismo  estos tejidos empiezan a incluir imágenes con motivos vegetales y animales así como dibujos geométricos.

Tendríamos que esperar a que llegara el Barroco (años 1600 – 1700) para que llegara el culto por el cortinaje entendido como elemento decorativo. Durante el Barroco se contraponen elementos arquitectónicos utilizándolos con cierta libertad, por ejemplo las ventanas comienzan a construirse más grandes, algunas llegan incluso hasta el suelo.

Destacar a los franceses en la segunda mitad del siglo XVII como los maestros del cortinaje. A principios del siglo XIX, los diseños se volvieron muy elaborados y pesados ya que se confeccionaban con abundante tela. La tendencia de los años posteriores iría inclinándose hacia modelos más sencillos.

A día de hoy las cortinas decoran las estancias en las que se desarrolla nuestra vida y son reflejo de nuestra personalidad. La tendencia cada vez más marcada es crear una atmósfera integral en la que pensemos conjuntamente en muebles, sofás, cortinas, fusionando todos los elementos para crear un estilo.