Consejos de decoración para el hogar

Hacer reformas en el hogar para darle un aire nuevo no es nada fácil. Por suerte hoy día se pueden decorar las estancias de nuestro hogar a un precio razonable y sin una inversión demasiado alta.

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Primero debemos hacer un análisis de nuestra casa en temas como, por ejemplo, iluminación o el tipo de detalles que buscaremos para darle un giro a la decoración de nuestro hogar. Seguidamente debemos comparar precios y buscar ofertas en tiendas online de decoración o en mercadillos de segunda mano.

En el salón podemos poner cortinas nuevas y combinar los cojines con el sofá o el tapizado de las sillas. Quizá sea el lugar de la casa donde más tiempo pasamos y por ello una de las más importantes. En el dormitorio podemos tapizar el cabezal de nuestra cama o colocar cortinas nuevas utilizando al máximo la iluminación natural.

Al baño se le puede dar un toque moderno, atractivo y original eligiendo accesorios como la cortina, puedes buscar una amplia variedad de ellas a través de la compra de cortinas de baño online. También puedes usar cepillos de dientes de un color llamativo para darle un toque fresco.

Con pequeños toques, que no tienen porque suponer un gran gasto económico, se le puede dar un giro a esa estancia que no tiene mucha vida o redecorar nuestro hogar con pequeños detalles originales.

El proyecto Valley Curtain (cortina del valle) de Jeanne-Claude y Christo

Jeanne-Claude y Christo era un matrimonio de artistas que realizaban instalaciones artísticas ambientales, parecidas al Land Art (corriente del arte contemporáneo, que utiliza el marco y los materiales de la naturaleza).

A finales de 1970, se prepararon para un proyecto titánico, la cortina del valle. Una tela, ni más ni menos, de 400 m. de largo que sería estirada a través del Rifle Gap, un valle en las Montañas Rocosas, en el estado de Colorado. Una cortina imposible de soportar por unas tradicionales barras para cortina de madera o unas barras de cortina niquel. Nada que ver con las bonitas cortinas que tenemos en nuestro salón, al contrario una megacortina en medio de una montaña; todo un espectáculo!

El proyecto Valley Curtain (cortina del valle) de Jeanne-Claude y Christo

La realización de la obra fue complicada debido a los 230.000$ que se debieron reunir y las protestas de algunos grupos ambientalistas. Finalmente, el proyecto requirió 14.000 m² de tela para ser colgada en un cable de acero, el cual estaba sujeto a barras metálicas fijadas en cada ladera de la montaña. También fueron necesarias 200 toneladas de hormigón, que debieron ser transportadas a mano en cubos cuesta arriba.

El presupuesto aumentó a 400.000$, causándole al matrimonio de artistas problemas con la financiación. Finalmente, se vendieron suficientes piezas de arte para reunir el dinero. El 10 de octubre de 1971, la cortina anaranjada estaba lista para ser colgada, pero estaba rasgada debido al viento y las rocas y por ello se debió fabricar una segunda cortina. El 10 de agosto del año siguiente, el segundo intento de colgar la cortina fue un éxito, aunque debió ser retirada 28 horas más tarde debido a la proximidad de una tormenta.

Tendencias en cortinas para el salón 2015

Las cortinas son una pieza de decoración esencial tanto en hogares como en interiores. Constituyen el modo más recurrente para vestir una estancia, así como un recurso muy útil para crear un ambiente más cálido y acogedor.

En el mercado podemos encontrar cortinas de toda clase de materiales, formatos y acabados, que van desde los más clásicos y tradicionales a los más modernos e innovadores; así como un gran variedad de barras para dichas cortinas. A esa variedad, debemos añadirle el auge que las compras on-line y el ecommerce están consiguiendo, hecho que permite adquirir a tan sólo un clic desde barras para cortinas planas a barras para cortinas de forja.

Tendencias en cortinas para el salón

Otra de las grandes virtudes de las cortinas y estores es que son elementos que permiten cambiar radicalmente la imagen de la estancia, por lo que se convierten en piezas de decoración muy recomendables a la hora de renovar la apariencia de una estancia. Por ello, cada año somos testigos de nuevos estilos, nuevos colores, texturas y combinaciones, que permiten adaptar la decoración de nuestro hogar a las nuevas tendencias.

Para este nuevo año que recién hemos estrenado, las tendencias en lo referente a cortinas vendrán marcadas por el protagonismo de dos colores, el verde y el azul en sus más distintas tonalidades, desde lo más fuertes hasta los más suaves y pasteles. Junto a estos colores, también tendrán su protagonismo colores que nunca pasarán de moda, como es el caso del blanco o el beige, además del naranja o el gris si se apuesta por el estilo industrial.

La cortina, de aislante del frío a adorno real

En la actualidad es casi posible poder decorar tu casa eligiendo todo lo que necesitas a través de internet, desde muebles, sillas hasta incluso adquirir barras de cortina online.

A lo largo de la historia esta pieza de tela que comúnmente cuelga de puertas y ventanas como adorno o para aislar la luz ha ido teniendo diferentes usos. Durante la época medieval, hacia los siglos V al XV, se empieza a vislumbrar el primer atisbo de lo que será la primera cortina, entendida como un aislante del frío, puesto que el castillo no ofrecía grandes comodidades y las ventanas, sin vidrios, eran muy pequeñas para taparlas en invierno

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Hacia el s.XIII el mobiliario, cortinas y persianas se elaboraban en distinto color pero con un único material. Aparecería un nuevo elemento de decoración, las galerías, gruesas y elaboradas en madera, sujetaban las cortinas; más o menos nuestro equivalente actual a las barras de cortinas.

Con la llegada del Renacimiento, la cortina se convierte en adorno real. Los nobles adquieren tejidos en Oriente y adornan los corredores de sus palacios. Ganan popularidad los tejidos como la seda, el terciopelo y los drapeados. Así mismo  estos tejidos empiezan a incluir imágenes con motivos vegetales y animales así como dibujos geométricos.

Tendríamos que esperar a que llegara el Barroco (años 1600 – 1700) para que llegara el culto por el cortinaje entendido como elemento decorativo. Durante el Barroco se contraponen elementos arquitectónicos utilizándolos con cierta libertad, por ejemplo las ventanas comienzan a construirse más grandes, algunas llegan incluso hasta el suelo.

Destacar a los franceses en la segunda mitad del siglo XVII como los maestros del cortinaje. A principios del siglo XIX, los diseños se volvieron muy elaborados y pesados ya que se confeccionaban con abundante tela. La tendencia de los años posteriores iría inclinándose hacia modelos más sencillos.

A día de hoy las cortinas decoran las estancias en las que se desarrolla nuestra vida y son reflejo de nuestra personalidad. La tendencia cada vez más marcada es crear una atmósfera integral en la que pensemos conjuntamente en muebles, sofás, cortinas, fusionando todos los elementos para crear un estilo.

Bañarse en la edad media

¿Alguna vez os habéis preguntado a qué olían las casas y la gente en la edad media? o ¿cómo serían los lugares destinados a la poca higiene que había? Seguro que no tenían nada que ver con los preciosos baños de diseño que existen hoy día y sus cortinas de baño con ollaos coloridas.

Parece ser que la caída del imperio romano trajo consigo la decadencia en lo que respecta a la costumbre del baño y muchas otras relacionadas con la higiene. Con la edad media las ciudades europeas se transformaron en lugares fétidos e insalubres, caldo de cultivo para epidemias y enfermedades.

Bañarse en la edad media

Escena en una casa de baños, miniatura anónima del siglo XV

A pesar de la poca falta de higiene que podía existir en los pueblos alejados de las grandes urbes, parece que en las ciudades existió una actitud positiva hacia el baño puesto que le otorgaban virtudes terapéuticas.

Los baños públicos florecieron en las grandes ciudades europeas hacia el s.XIII y en el siglo XV ya eran algo más normal. De hecho, muchas de las ilustraciones medievales que encontramos y que han llegado a nuestros días muestran a la gente tomando baños comunales, eso sí; sin barra de cortina que pudiera tapar intimidades.

a pesar de que la actitud de la iglesia hacia el baño no era positiva pues lo condenaba ya que lo veía como un lujo innecesario y pecaminoso.

Cabe mencionar, que el baño era un punto importante en los rituales de los caballeros medievales. Para su nombramiento, el candidato debía bañarse antes de pasar la noche en oración, con la finalidad de que estuviera corporal y espiritualmente purificado antes de convertirse en caballero.

Parece ser que la costumbre del baño de convirtió en algo menos común causada por las grandes epidemias medievales, cuando empieza a pensarse que el agua es la culpable de los contagios entre los cuerpos, porque a través de los poros de la piel se podía acceder a todos los órganos. Empieza entonces la época del baño en seco, restringiéndose el uso del agua a manos y cara. Esta situación se mantendría hasta casi el siglo XIX.

El bidet: elemento habitual del baño

Muchas veces estamos tan acostumbrados a su uso, que no reparamos en ese utensilio tan útil del baño llamado bidet. Es un elemento habitual del cuarto de baño, junto a la ya tradicional cortina de baño con anillas, en muchos países y prácticamente desconocido en otros

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Fue creado a finales del siglo XVII por fabricantes de muebles franceses, como receptáculo de agua destinado a que los jinetes se aliviasen tras una dolorosa jornada a caballo. De hecho, la palabra bidet significa caballito/pony en referencia a la postura que se adopta al sentarse (en francés antiguo, bider significaba trotar).

Se apunta a que fue diseñado como utensilio de higiene íntima para dedicarse a las artes amatorias una vez las damas estuvieran limpias e incluso como método anticonceptivo. En sus orígenes estaba colocado sobre un caballete y era utilizado en el dormitorio. Hacia el 1739 se empieza a anunciar comercialmente en París, ya en 1770 lo encontramos como elemento indispensable en los baños.

Según las crónicas de la época, el bidet como elemento del baño fue mencionado por primera vez en 1710 en Francia cuando madame de Prie, una noble que vivió durante el reinado de Luis XV, recibió en audiencia al marqués de Argenson sentada en su bidé

El baño: ese ritual ancestral

El ritual del baño a lo largo de la historia siempre ha significado mucho más que unos minutos dedicados al aseo personal. Para las civilizaciones antiguas como Egipto, Grecia y Roma, el baño adquiría connotaciones religiosas que se entremezclaban con el placer, la ostentación de la riqueza (grandes palacios y marfiles) y también con la utilización de aceites y esencias aromáticas.

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Parece que en la actualidad, parte de ese ritual ha quedado en nosotros. Tras un día duro, cansado y largo, la ducha reparadora te hace volver a la vida. Con menos ostentación quizá, y con la suerte, por ejemplo, de poder adquirir cortinas de baño online a tan sólo un clic y «ostentar» de tener la más bonita de toda la comunidad de vecinos.

Volviendo atrás en la historia, los baños egipcios, por ejemplo, se hacían con agua y aceites o ungüentos perfumados, que solo los sacerdotes sabían preparar. Estos aceites sagrados protegían la piel sometida a la sequedad y el calor de un clima duro. Las clases sociales más adineradas tenían esclavos dedicados exclusivamente a bañar a sus señores.

Los griegos sin embargo, odiaban los baños, pues creían que eran símbolo de debilidad y consideraban que este tipo de hábito disimulaba el olor fuerte del atleta.  No todos opinaban igual, los más ricos tenían en sus casas recipientes cincelados, llenos de agua para bañarse. Además, en todos los cruces de caminos había una pila de mármol con agua para que los más pobres pudieran también bañarse.

Para los romanos el baño era un acto social básicamente, acudían a imponentes baños públicos que eran verdaderos palacios donde podían bañarse hasta 2.500 personas. Aquí iban pasando por diferentes estancias con aguas a diferentes temperaturas: frigidarium (agua fría), tepidarium (agua tibia) y finalmente caldarium, una especie de sauna que provocaba una gran transpiración.